El servicio de ayuda a domicilio (SAD) del Ayuntamiento de Barakaldo comienza a salir del colapso. Tras casi un año y medio sin tramitar nuevas solicitudes, el área ha empezado «actualizar» y reducir una lista de espera que pretende dejar «a cero» este año tras comprobar que estaba «extraordinariamente inflada». Al parecer, en ella figuraban muchos demandantes que ya han optado por otras alternativas para el cuidado de las personas mayores o dependientes a su cargo.
La gestión del SAD ha provocado un fuerte enfrentamiento entre el equipo de gobierno -PSE- y la oposición en los últimos meses. IU y PNV fueron los primeros en denunciar en 2009 «irregularidades» en un área en el que, pese a existir una importante demanda, la incorporación de usuarios era «lentísima». En enero el Ayuntamiento nombró a una nueva empresa para que explotara el servicio pero, al parecer, la situación no mejoró. De hecho, en febrero el PP advertía de que la nueva contrata estaba a punto de tener que acogerse a un expediente de regulación de empleo ante la falta de usuarios.
Aunque en un corto periodo de tiempo el servicio había contabilizado casi 150 bajas por el fallecimiento de usuarios, existía una lista de espera de «800 personas» -el Ayuntamiento tenía contabilizadas unas 450 el pasado invierno- cuyas altas no podían tramitar los saturados servicios sociales municipales. El Consistorio prometió entonces atajar la situación «antes del 30 de mayo».
71 altas en cinco meses
Con 24 días de retraso, la edil de Acción Social, Amaya Rojas, comparecía ayer para hacer balance de la situación y anunciar que «nos hemos puesto manos a la obra para eliminar la lista de espera y estamos a punto de hacerlo». Según los datos aportados por el Consistorio, desde enero ha gestionado 71 expedientes nuevos, con lo que el servicio atiende ya a 398 vecinos. «Pese a tener dinero suficiente en las arcas municipales, en año y medio no pudimos dar altas porque el contrato con la anterior adjudicataria lo impedía», aclaró Rojas.
La concejal también quiso explicar las contradicciones que existen en torno al número de personas que engrosan una lista de espera que estaba «anticuada». Las últimas gestiones la habrían reducido a 69 vecinos, de los que «menos de una veintena supera el mínimo legal que recoge la Ley de Dependencia para que le sea prestado el servicio». Después de que el área de Acción Social haya analizado «exhaustivamente» la lista de candidatos mediante entrevistas telefónicas y personales, «se ha constatado que la mayoría de las personas que estaban en aquella lista de espera no actualizada habían optado finalmente por otras alternativas», concluyó Rojas. Las explicaciones llegan 24 horas antes del pleno municipal en el que el PP solicitará información sobre «el retraso acumulado en la tramitación de las altas» del SAD.
